Alimentos que debe evitar cuando tiene diabetes tipo 2

La diabetes es una afección que puede tener efectos nocivos en el corazón, los ojos y otros órganos. El riesgo de accidente cerebrovascular e infecciones aumenta, y puede experimentar poca energía y presión arterial alta. Esa es la mala noticia. La buena noticia es que administrar su dieta puede hacer mucho para aliviar los preocupantes síntomas de la diabetes. Si tiene sobrepeso y puede perder tan poco como 10 a 15 libras, puede mejorar la sensibilidad a la insulina y el control glucémico, disminuir la presión arterial e incluso reducir el colesterol LDL y los triglicéridos.

La mejor dieta a seguir con diabetes es la que evita los picos peligrosos en el azúcar en la sangre y le permite mantener un peso óptimo para su cuerpo. A continuación encontrará una lista de alimentos que debe evitar especialmente si tiene diabetes tipo 2, así como algunos sustitutos más saludables.

Comida azucarada

Probablemente ya sepa que la diabetes significa que debe tener mucho cuidado al comer azúcar para que su glucosa en la sangre no aumente a niveles peligrosos. Los alimentos con una tonelada de azúcar agregada pero sin valor nutricional son las peores cosas que puede comer. Los dulces, los refrescos y los postres horneados también contribuyen al aumento de peso, lo que agrava aún más el problema. Sin embargo, no es necesario evitar el azúcar por completo. La clave es satisfacer el antojo con fruta en su lugar. Contiene fibra junto con azúcar natural, lo que ralentiza la absorción de glucosa. Si come frutas con algo alto en proteínas, logrará una mejor estabilización del azúcar en la sangre.

Jugo de fruta

Acabamos de decirle que la fruta es una opción inteligente para los diabéticos con gusto por lo dulce, pero el jugo de fruta contiene niveles concentrados de azúcar de fruta y nada de fibra. A pesar de que tiene algunos nutrientes y es mucho mejor que los refrescos, el jugo de fruta aún enviará su azúcar en la sangre a través del techo. Tampoco lo hace sentirse lleno, ya que la fruta entera puede y puede contribuir a comer en exceso. Una buena alternativa es el agua con gas con solo un chorrito de limón o jugo de limón.

Arroz Blanco, Pan Y Harina

Los almidones refinados no son saludables para nadie, especialmente para las personas con diabetes. El procesamiento, o refinación, elimina los granos enteros de su fibra, vitaminas y minerales para hacerlos esencialmente vacíos nutricionalmente. Estos carbohidratos malos se descomponen en azúcar en su sistema digestivo y aumentan los niveles de glucosa. Evite alimentos como el arroz blanco, el pan blanco y la mayoría de las pastas. Los granos integrales, por otro lado, son carbohidratos que se descomponen gradualmente. Los alimentos como el arroz integral o salvaje, los cereales ricos en fibra (bajos en azúcar) y los panes integrales son mejores opciones.

Productos lácteos llenos de grasa

Las grasas saturadas son peligrosas porque aumentan el colesterol LDL y aumentan el riesgo de enfermedades del corazón, lo que preocupa más a las personas con diabetes. Peor aún, los estudios han demostrado que las dietas altas en grasas saturadas pueden empeorar la resistencia a la insulina. Los productos lácteos con toda la grasa que se elaboran con leche entera pueden contener una gran cantidad de grasas saturadas que sería mejor evitar. Omita la crema, el yogur integral, el queso crema, la mantequilla y el helado en favor de las versiones sin grasa o con bajo contenido de grasa. La leche de coco también es un sustituto sabroso que puede darle esa sensación de boca satisfactoria sin una tonelada de grasa.

Comida frita

Seguro que son sabrosos, pero los alimentos fritos están cargados de grasa y calorías. Comer demasiado aumenta las libras rápidamente y puede hacer que su azúcar en la sangre se dispare. Diferentes alimentos fritos afectan los niveles de azúcar en la sangre de manera diferente; por ejemplo, las papas fritas aumentan el azúcar en la sangre más rápido que el pollo frito, ya que el pollo contiene proteínas y las papas son carbohidratos puros. Pero el contenido de grasa en los alimentos fritos disminuye la absorción, lo que lleva a un aumento posterior que es difícil de predecir y puede sorprenderlo en el peor momento. Estos alimentos a menudo también se fríen en aceites hidrogenados y están llenos de grasas trans peligrosas, que aumentan el colesterol malo, disminuyen el colesterol bueno y aumentan el riesgo de enfermedades cardíacas. No existe un nivel seguro de grasas trans para nadie, pero especialmente para las personas con diabetes.

Alcohol

Es posible que no necesite abstenerse completamente del alcohol, pero debe tomarlo con moderación de acuerdo con las recomendaciones de su médico. Los niveles variables de alcohol pueden aumentar o disminuir sus niveles de glucosa en la sangre, y algunas pastillas para la diabetes (como las sulfonilureas y las meglitinidas) estimulan al páncreas a producir más insulina para disminuir los niveles de glucosa en la sangre. La combinación de medicamentos y alcohol tiene el potencial de causar una emergencia médica en forma de hipoglucemia o "shock de insulina". También le recomendamos que nunca beba alcohol con el estómago vacío y siempre controle su azúcar en la sangre antes de consumir alcohol.

Cortes grasos de carne

Al igual que los productos lácteos, algunos cortes de carne son demasiado altos en grasas saturadas. Las grasas saturadas no solo aumentan los niveles de colesterol malo, sino que también aumentan la inflamación en el cuerpo y ponen a las personas en mayor riesgo de enfermedad cardíaca en un lugar riesgoso. Los investigadores también sospechan que otros componentes en la carne roja y procesada aumentan el riesgo de diabetes, incluido el sodio, que puede elevar la presión arterial y causar resistencia a la insulina. Los nitratos en las carnes procesadas como el tocino y los hot dogs también pueden aumentar la resistencia a la insulina y afectar negativamente al páncreas. Manténgase alejado de los filetes más gordos, como el T-bone, el filet mignon y el porterhouse, a favor de cortes más delgados como la parte superior redonda, el ojo redondo y el solomillo superior. Incluso las mejores opciones son pollo y pavo sin piel, pescado y lomo de cerdo.

La moderación es clave para mantener una dieta saludable para la diabetes. No necesariamente tiene que renunciar a todo lo que ama, pero tendrá que decir que no a algunos antojos de golosinas fritas y azucaradas, y no estamos negando que esos antojos puedan ser poderosos. Pero también hay formas de tomar decisiones más saludables que siguen siendo satisfactorias, como pechuga de pollo al horno con aguacate y queso bajo en grasa, o algún helado vegano hecho con leche de coco. Su médico sabe mejor qué tipo de dieta satisfará sus necesidades, así que asegúrese de prestar atención a sus consejos. ¡Es probable que hacer estos cambios en la dieta, prudentes para cualquier persona, independientemente de su estado de salud, los haga sentir mejor que nunca antes de su diagnóstico de diabetes!

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